Los Césares y la escultura I

              Imperator Cesar Augusto

Cayo Julio Cesar Octaviano (23 de septiembre de 63 a.C.-19 de agosto de 14 d.C.), así sería conocido el que en uno de los periodos mas tumultuosos de la historia de Roma se alzaría con el poder poniendo fin a la era republicana de Roma y comenzando la época de mayor expansión de Roma, el Imperio. Tras la victoria de Accio (31 a.C.) frente a las fuerzas de Antonio y Cleopatra, Octaviano tenia por delante la ardua tarea de dar a su poder personal una base legal, y estabilizar la res publica tras varios años de continuas guerras entre hermanos. Enmascarado por la restauración de la república, Octavio, empezó a acumular poder en detrimento de sus supuestos iguales empezando por acaparar el título de princeps, que designaba a quien por sus virtudes e influencia ocupaba un lugar preeminente entre sus iguales.

A pesar de ello las bases aun eran insuficientes y en el año 27 se realizo un acto por el cual Octaviano, devolvió los poderes que le habían sido concedidos en calidad de Imperator al senado y al pueblo declarando la restitución de la res publica. Todo ello a cambio de la protección y defensa del Estado (cuta tutelae rei publicae) otorgandole nuevos honores como el título de Augustus (atributo de Júpiter) y permitiendole conservar los poderes militares del imperium en las provincias no pacificadas o amenazadas externamente (véanse aquellas dotadas de un ejercito estable). Con todo ello la restitución de la República era una fachada para obtener a vista del Senado y la Curia el poder de la auctoritas (prestigio) que le permitía aplicar su legitimidad moral para imponer su propia voluntad como Imperator Cesar Augusto.

Denario 13-14 d.C. Augusto laureado como Cesar en el anverso y togado en una cuadriga sosteniendo el cetro del águila en el reverso.

Tras esta introducción a la figura de Augusto y como obtuvo el poder para controlar un imperio podemos observar esta misma figura desde varios puntos de vista. En esta ocasión realizaremos esta observación desde las artes escultóricas en todos los formatos y materias primas posibles, como por ejemplo la imagen anteriormente presentada del grabado de un denario romano con la imagen de Augusto ya con varias de los atributos del poder como son la corona de laurel, el bastón de mando rematado en un águila y la acción de representar a Augusto en una cuadriga. El laurel es el símbolo del triunfo, el bastón de mando símbolo de poder político, y la cuadriga símbolo de poder militar a la manera de los desfiles que los generales victoriosos realizaban tras volver de una campaña exitosa montados en cuadrigas como la representada.

En una de las facetas que mas destacó la figura de Augusto fue en el ámbito religioso, a raíz de la gran reforma que realizó el primer emperador en la religión oficial como parte de la reconstrucción del estado romano. Su título de pontifex maximus le otorgaba el mando de la religión romana, en concordancia de este título y puesto Augusto es representado en ocasiones con una toga y velo  (velado) símbolos de este cargo, en las representaciones de bulto redondo encontramos un Augusto de rostro sereno dado a la espiritualidad, aunque a la mayoría de estatuas les faltan los brazos se sabe que en estos debía sostener un plato para las libaciones haciendo referencia una vez mas a su papel de pontifex maximus. De este cargo también tenemos representaciones en los relieves de una de las mayores obras de Augusto, el Ara Pacis y en varios altares Lares que representan a Augusto con la toga y velo. Mientras que en el Ara Pacis Augusto esta en una procesión junto a familiares y otros cargos públicos, en los altares Lares Augusto esta en calidad de genio flanqueado por el que iba a ser su heredero, Cayo, y por su hija Julia en calidad de Venus.

Relieve del Ara Pacis representando la familia de Augusto, todos ellos togados. Museo dell´Ara Pacis, Roma.

Altar de Lares con Augusto en el centro, Cayo a la izquierda y Julia a la derecha. Copia del original del siglo II d.C. Galeria degli Ufizzi, Florencia.

A través de otras representaciones en bulto redondo podemos seguir viendo una figura de Augusto como un hombre tranquilo y sereno pero con la ostentación de un gran poder, también podemos discernir a través de sus representaciones su obra política que se puede resumir muy brevemente en una serie de conceptos, la centralización de los poderes del Estado, la vinculación con la vida pública, y la figura del abstemio, lacónico y humilde. En concreto hay varias figuras de bulto redondo que reflejan estas facetas, en primer lugar la representación de Augusto como ostentante del poder militar en calidad de general o también llamado toracato (con coraza). El mas conocido de este estilo es el Augusto de Prima Porta, hallada el 20 de abril de 1863 en la Villa Livia, en esta representación augusto siempre con el rostro sereno porta (o debería portar, queda un fragmento de ello en la propia escultura) el bastón de mando, la toga consular, y la coraza reflejando todos ellos su faceta de jefe militar de las fuerzas del Imperio.

Augusto de Prima Porta. Mueso Vaticano, Roma.

Otra representación de Augusto le otorga un carácter mas divinizado, representándose desnudo, meditabundo y con la toga al brazo el cuerpo de Augusto esta idealizado por su vinculación con las divinidades de Roma y adquiriendo el mismo este carácter divino en su muerte. Finalmente Augusto también puede verse representado ejerciendo la faceta mas política como un magistrado o legislador (togado) siendo representado con una toga, esta vez sin velo, y con una rollo de pergamino en la mano representado estas mismas leyes.

Representaciones de Augusto. De izquierda a derecha, divinizado, togado y velado.

Bibliografía:

• Roldán, José Manuel. Césares: Julio César, Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón: la primera dinastía de la Roma imperial. La Esfera de los Libros, 2008. Madrid.
• De Quiroga, Pedro Manuel López Barja; Salmonte, Francisco Javier Lomas. Historia de Roma. Akal, 2004.
• Everitt, Anthony. Augusto: el primer emperador. Grupo Planeta (GBS), 2008.